Todos sabemos que el consumo de productos lácteos es esencial para vivir sanos, especialmente para el bienestar de nuestros huesos. Pero más allá del calcio, y de lo buenos que están, los quesos esconden un montón de propiedades beneficiosas para nuestro organismo.
¿Por qué el queso es beneficioso?
- El queso ayuda a prevenir la caries, ya que aumenta el nivel de pH de nuestra boca y evita la erosión del esmalte dental.
- Contiene ácido linoleico conjugado, que puede aumentar la masa muscular magra y reducir la grasa corporal, además de ser considerada una sustancia anti-cancerígena.
- Es una fuente de zinc, que tiene diversas funciones en el cuerpo: ayuda a recuperar tejido, previene y trata la degeneración macular (problemas de visión), protege la piel y mantiene las uñas y el cabello fuertes.
- Reduce el riesgo de osteoporosis, una enfermedad causada por la no absorción de calcio en los huesos. El mejor tratamiento es una mezcla de proteínas, calcio y vitaminas, tres componentes que abundan en el queso.
- Contiene vitamina B, que es importante para mantener nuestra piel sana.
Es importante saber también que los quesos más duros contienen una cantidad mayor tanto de grasa y sal como de vitaminas y minerales, mientras que los frescos contienen menos. Así, el queso es un alimento que por su versatilidad debe formar parte de una dieta sana para todo tipo de personas.