La carne de ternera ecológica nos aporta muchos más beneficios nutricionales que aquella producida de forma industrial y, además, apoya el desarrollo sostenible de su producción.
Propiedades nutritivas
La alimentación natural y ecológica de estos animales supone que la carne que consumimos contenga más vitaminas y propiedades antioxidantes, ayudando a nuestras defensas. La ternera ecológica tiene menos grasa que la industrial y nos aporta un nivel mucho más alto de ácido linoleico, que favorece la reducción de los niveles de colesterol e incluso la pérdida de peso corporal.
Bienestar animal
La ganadería que produce estas carnes proporciona condiciones de bienestar dignas para los animales, respetando sus necesidades biológicas y de comportamiento. Esto supone que su alimentación es de productos 100% ecológicos, sin aditivos, antibióticos ni hormonas que fuercen su crecimiento. Los animales tienen acceso a pastos nutritivos (sin pesticidas, insecticidas ni ningún rastro químico) y a instalaciones cuidadas como forma de potenciar su sistema inmunitario de forma natural.
Producción sostenible
La carne de ternera ecológica proviene de pequeñas granjas familiares de proximidad. Además del bienestar animal, el sello del Consell de la Producció Agrària Ecològica (CCPAE) certifica que estos productos han sido controlados en todo su proceso de elaboración, envasado y comercialización de acuerdo con los principios de la agricultura ecológica y sostenible.